Al acercarse a la Catedral de Berlín, lo primero que impresiona es su cúpula monumental que domina el paisaje de la Isla de los Museos. Caminar por la zona ya es un viaje en sí mismo: los adoquines, los edificios históricos y el río Spree crean una atmósfera que combina historia y modernidad. Al entrar, la riqueza de su arquitectura te envuelve: vitrales, esculturas, columnas y la grandiosa nave central que refleja siglos de arte y fe. Subir a la cúpula es toda una experiencia: las escaleras estrechas y los pasillos sinuosos conducen a una vista panorámica de Berlín que permite contemplar tanto la isla como los edificios emblemáticos de la ciudad.

Historia de la Catedral
La Berliner Dom es la iglesia protestante más grande de Berlín y fue construida entre 1894 y 1905 bajo el reinado del Kaiser Guillermo II. Aunque sufrió daños graves durante la Segunda Guerra Mundial, fue restaurada y reabierta en 1993. La catedral combina estilos renacentista y barroco, y alberga la cripta de los Hohenzollern, donde descansan varios miembros de la dinastía real prusiana.
Tips para visitar la Catedral
- Cómo llegar: Se encuentra en la Isla de los Museos, en el centro de Berlín. Puedes llegar fácilmente caminando desde Alexanderplatz o tomando el S-Bahn hasta la estación Hackescher Markt o Berlin Friedrichstraße.
- Horarios y entradas: Abierta todos los días, con entradas pagadas para acceder a la cúpula y la cripta. Es recomendable comprar el ticket con antelación en temporada alta.
- Mejor época para visitar: Primavera y otoño ofrecen clima agradable para recorrer la isla y disfrutar de la vista desde la cúpula.
- Datos interesantes:
- La cúpula tiene más de 98 metros de altura.
- La cripta contiene más de 90 sarcófagos de la familia Hohenzollern.
- Es posible asistir a conciertos de órgano que resaltan la acústica impresionante de la nave principal.